LA HISTORIA DEL ROMANCE QUE INSPIRÓ “GOOD RIDDANCE ” DE GREEN DAY

Durante aquellos primeros años de la década de los 90, Billie Joe Armstrong sostenía una relación con una chica llamada Amanda. Ella, según se sabe, era una feminista activa que constantemente se encontraba persiguiendo causas sociales. El vocalista de Green Day estaba perdidamente enamorado de esta chica.

Sin embargo, Amanda iba a continuar su vida académica en Sudamérica. Así, este rompimiento inspiró la composición de “Good Riddance”, claro además de una fiestecilla a la que el vocalista fue en aquellos complicados momentos, como lo cuenta a Rolling Stone:

Era para una novia que se mudaba a Ecuador. Fui a esta fiesta en una casa en Berkeley, donde los estudiantes universitarios pasaban una guitarra acústica y cantaban… Recuerdo haber dicho: ‘Oh, viejo, debería intentar hacer una canción acústica’, así que escribí esa canción sobre ella y el final de nuestra relación… Me había tatuado su nombre, y luego tuve que cubrirlo, eso es todo… [Good Riddance] Se trata de intentar estar bien y aceptar que, en la vida, las personas van en diferentes direcciones. Esta fue una dirección tremendamente diferente: me estaba preparando para salir de gira y promocionar a Dookie, tenía un sencillo en la radio y todo estaba empezando a suceder. Ella se estaba mudando a Ecuador para continuar sus estudios y vivir allí con una familia. La gente entra en tu vida y es maravilloso, pero parecen salir de tu vida tan rápido como entraron. De eso se trata la canción…

La historia con Amanda, aparentemente, inspiró otras canciones más como “She” (Dookie, 1994), “She’s A Rebel” y “Whatsername” (American Idiot, 2004), pero sin duda la más significativa fue “Good Riddance (Time Of Your Life)”. El tema acústico por excelencia de Green Day eventualmente apareció para musicalizar series como Seinfeld y el drama médico E.R. También, y es válido decirlo, abrió la brecha para que la banda siguiera experimentado con pistas de corte más suave en el futuro como lo fueron “Wake Me Up When September Ends” o “21 Guns”. Hoy en día, a casi 25 años de su lanzamiento, es la canción con la que recurrentemente el grupo cierra sus shows. Pues bueno, esa es la historia detrás de este clásico noventero nacido de un rompimiento.