¿Cuáles son los idiomas más fáciles y difíciles de aprender en el mundo?

Cada 1 de enero, millones de personas en todo el mundo escriben sus deseos para el año nuevo, entre los que no suele faltar intentar adelgazar, hacer más deporte… y aprender un idioma.

Pero, ¿qué idioma estudiar? La lógica dice que el inglés es el más demandado por la influencia de Estados Unidos. No solo es la lengua oficial de los negocios, sino que, con el inglés, puedes viajar a cualquier lugar del mundo ya que siempre encontrarás a alguien que chapurree ese idioma en el destino elegido. Eso sí, si se trata de estudiarlo, decide si quieres estudiar el inglés británico o el norteamericano ya que, además de cambiar los acentos, también hay multitud de expresiones diferentes como ocurre con nuestro castellano y el español de América Latina.

Lógicamente, los idiomas más fáciles de aprender para un español son los que tienen su origen en el latín: francés, portugués o italiano comparten multitud de palabras que son fácilmente entendibles por su etimología. Lo mismo sucede con el rumano, que también es una lengua latina, aunque su aprendizaje solo sirva para hablarlo en este país del este de Europa.

El alemán sería el siguiente idioma más sencillo de aprender para los hispanohablantes. Se trata de una lengua germánica que tiene tres géneros (masculino, femenino y neutro) y cuatro declinaciones (nominativo, acusativo, dativo y genitivo). Aunque parezca imposible cuando se comienza a estudiar, lo importante es aprender las estrictas reglas sintácticas. Una vez interiorizadas, todo será mucho más sencillo.

Idiomas difíciles… e imposibles

El árabe, el japonés y el chino (mandarín o cantonés) son los idiomas más difíciles también es muy complicado el húngaro, para el que se necesitan cientos de horas de aprendizaje. Pero para quienes busquen un auténtico desafío, el griego y el ruso son para ti